Estamos orando para que la página de este fundador sea una bendición para aquellos que se sentaron bajo el ministerio del pastor Chuck. También esperamos que sea un recordatorio de la filosofía del ministerio y de su base bíblica que se nos ha transmitido – y ahora la nuestra para pasar a los demás.
Para aquellos de ustedes que sólo han conocido al pastor Chuck a través de grabaciones o sus libros y se han convertido en parte de la familia Calvary Chapel, sabemos que serán alentados y reafirmados. A innumerables personas – a las que quizás nunca conozcamos hasta ese Gran Día, cuando termine nuestro trabajo – oramos que serán edificados y alentados, ya que todos somos parte de la Iglesia, la Esposa de Cristo.
El archivo de enseñanza del pastor Chuck se puede encontrar en thewordfortoday.org.
El pastor Chuck había sido el pastor de Calvary Chapel Costa Mesa durante casi 50 años y estuvo en el ministerio cristiano durante unos 65 años. Él tenía 86 años cuando entró en la Gloria. Su impacto directo e indirecto que tuvo en la iglesia cristiana en el siglo 20, fue como el de pocos:
- Miles y miles de iglesias han sido plantadas en todo el mundo como fruto de su trabajo.
- Decenas de miles de pastores – tanto en el movimiento de Calvary Chapel como mucho, mucho más allá – han sido influenciados y entrenados por él.
- Millones de personas llegaron a una confianza de salvación en, y una relación con Jesucristo, y millones más fueron llevados a la madurez cristiana a través de su enseñanza bíblica y ministerio más extenso.
- El ambiente de adoración del cristianismo contemporáneo nació esencialmente a través de su ministerio.
- Su énfasis en la exposición verso por verso de la Biblia, como el centro del ministerio de enseñanza y predicación de la iglesia ha tenido una gran influencia.
Comienzos
Chuck Smith nació y creció en Ventura, en un hogar cristiano, bajo la influencia firme de su madre piadosa que oraba y su padre un evangelista sencillo.
Fue en 1942, cuando Chuck Smith tenía 15 años, que consagró su vida al servicio cristiano. Ese año, él fue el único adolescente de su iglesia en ese campamento; el siguiente año, dirigió al grupo de jóvenes y llevó a un gran grupo de niños con él al mismo campamento.
El creció en la Iglesia Cuadrangular (en Ventura), y asistió a la Escuela Bíblica Cuadrangular, Life Bible College en Los Ángeles. Después de graduarse, se lanzó al ministerio con su joven esposa Kay. Siendo un líder inteligente y dotado, era fácil para él pensar que el mundo lo estaba esperando y que el éxito en el ministerio vendría con bastante facilidad, pero no fue así.
El primer pastorado de Chuck comenzó en junio de 1948 en Prescott, Arizona. Ganaba $15 a la semana, y su apartamento costaba $45 al mes – pero nunca les faltó. Dios le mostró a Chuck Su fidelidad proveyendo todos los días.
Después vino el pastorado en Tucson, luego en Corona – donde la iglesia disminuyó durante sus dos años allí. Cuando el llegó, habían 57 personas, y en su último domingo allí, habían 27 y 7 de ellos eran de su misma familia.
El siguiente fue en Huntington Beach. A Chuck le encantaba vivir allí y quería romper el patrón de cambiar iglesias cada dos años, por quedarse sin sermones. Fue entonces que comenzó a enseñar verso por verso a través del libro de 1 Juan. Chuck aprendió la enseñanza expositiva y la iglesia se duplicó en un año. Después enseñó Romanos, y al serle mostrada la gracia de Dios, esto revolucionó su vida, después de haber crecido en una relación con Dios, orientada a las obras. Al hablar de esto, Chuck dijo:
“No recuerdo mi experiencia de conversión, pero sí recuerdo mi experiencia en la gracia.”
Después de muchos pastorados y muchos años de ministerio, Chuck se enfrentó con una encrucijada. En Corona trabajó como gerente de abarrotes en el supermercado Alpha Beta. Finalmente enfrentó la decisión de elegir el ministerio o el trabajo en el supermercado. Después de una noche de desvelo, el sumó las facturas pendientes que ascendían a $ 416 y pensó que, como no tenía ingresos, lo correcto era olvidarse del ministerio. A la mañana siguiente, una persona lo llamó prometiendo $ 426, que se los enviará por cheque. Chuck estaba eufórico; pero Dios le habló a su corazón por la euforia que sintió ante la promesa de un hombre y por la noche de desvelo que sufrió por no confiar en la promesa de Dios.
“La confianza no puede ser parcial. Es una propuesta de todo o nada. Las lecciones de Cristo sobre la fe eran idénticas. No hay espacio para entregarse a medias cuando somos llamados a caminar sobre el agua.”
Finalmente, un nuevo estudio bíblico en grupo en Corona comenzó a florecer, y la gente comenzó a apoyar financieramente a Chuck y su trabajo, tanto así que las cintas de casete de los estudios bíblicos pudieron ser producidas en un programa de radio, que simplemente sirvió para aumentar el interés, y la gente se desbordó en este grupo en Corona. Y finalmente se pareció al tipo de situación de la iglesia que Chuck y Kay habían esperado toda su vida en el ministerio.
Sin embargo, inesperadamente, y por fe, confiando en la dirección del Espíritu Santo, el abandonó esa congregación floreciente en Corona, para venir a una iglesia pequeña y preocupada en Costa Mesa, llamada, Calvary Chapel.
Costa Mesa
Calvary Chapel en Costa Mesa fue una iglesia independiente con raíces Cuadrangular, que comenzó en el salón comunitario de un parque de casas rodantes en 1961, por el pastor Floyd Nelson. En 1965, la junta de la iglesia y el pastor Floyd Nelson decidieron que el pastor iba a tener un permiso de seis meses de ausencia de sus funciones.
En las reuniones de la junta directiva de estos primeros años, Chuck se sentaba en su escritorio en la pequeña oficina de la pequeña iglesia, que podía acomodar a 90 personas como máximo. Él no usaba una agenda para reuniones; los miembros de la junta traían diferentes asuntos de negocios para la iglesia, y él escuchaba con atención. Ellos le pedían su opinión y Chuck decía algo como:
“Bueno, he descubierto que donde Dios guía Él provee. Debemos hacer que nuestra prioridad sea buscarlo primero y Él se encargará de estas otras cosas.”
El impacto de Calvary Chapel
En un sentido, el impacto de Calvary Chapel es evidente: unas 1500 iglesias plantadas en todo el mundo, y entre ellas varias de las iglesias más grandes de los Estados Unidos. Hay miles más– decenas de miles– que son iglesias de Calvary Chapel, pero no de nombre.
También vale la pena decir que incluso en los primeros días hubo fuertes críticas contra Calvary Chapel. Otros decían que Calvary Chapel atraía a los jóvenes por tener la comunión con papas fritas y coca cola. Más seriamente, en los primeros días, Calvary Chapel fue criticada por ser “religión de línea de producción”, o por “satisfacer solo lo que la gente quería escuchar diluyendo el mensaje para lograr la atracción en masa.”
Sin embargo, el fruto, a lo largo de los años – en la profundidad del discipulado y el número de líderes entrenados y sirviendo a Dios – ha refutado esta acusación. En cambio, los observadores imparciales han quedado impresionados al considerar a Chuck Smith y al movimiento de Calvary Chapel.
El Dr. Donald Miller en su libro, Reinventando el Protestantismo Americano, dijo audazmente: “Calvary Chapel puede ser considerada como pionera de las nuevas iglesias por excelencia.” Calvary Chapel estaba estableciendo el patrón para la manera en que toda esa generación “oficiaba la iglesia”.
Además, casi sin ayuda, Chuck Smith comenzó un resurgimiento de las enseñanzas bíblicas expositivas en los púlpitos de la iglesia con su énfasis en la exposición verso por verso de los Libros de la Biblia. Por supuesto que él no fue el único maestro expositivo de esa época – hombres como Ray Stedman y más tarde, John MacArthur también se destacan – pero sin duda, él fue uno de los pocos y más influyentes.
Hughes Oliphant Old, un destacado erudito de la predicación, observó que Chuck Smith estaba “reviviendo la exposición sistemática de las Escrituras…En nuestros días, es uno de los ejemplos más puros de un predicador que sigue los pasos de Crisóstomo, Agustín, Zwinglio y Calvino.”
La última palabra le pertenece a Chuck Smith:
“Calvary Chapel no es una ambición cumplida. No es el resultado de un deseo egoísta de pastorear una iglesia gigantesca. Me canso mucho de imaginar pastorear una congregación de más de 250 personas. Los resultados que ahora ven sucedieron por el poder del Espíritu Santo; ‘no con ejército, ni con fuerza, sino con el Espíritu de Jehová’ (Zacarias 4:6).”
Nunca queremos adorar a un hombre – así que no lo hacemos. Sin embargo, es maravilloso recordar lo que Dios hizo por medio de él. En algunos aspectos, Chuck era excepcional, en otros aspectos, él no fue excepcional. Dios usó a un hombre lo suficientemente excepcional para llevar la carga, pero lo suficientemente normal para que Dios recibiera la gloria.